La mayor parte de los entrevistados, tanto cirujanos como responsables de centros, están de acuerdo al opinar que los procedimientos que no necesitan cirugía se incrementarán en los próximos años.
Asimismo, se considera que las alternativas a la cirugía estética mediante procedimientos no quirúrgicos son ya un hecho. En este sentido, la recesión económica puede haber influido positivamente en la demanda de medicina estética, que posiblemente ha recibido pacientes que tradicionalmente habrían optado por la cirugía. Con la perspectiva de un escenario económico más favorable, sería recomendable que el sector de la cirugía estética trabajase en estrategias para recuperar a estos pacientes.
En cualquier caso, y como se ha comentado, se prevé una reactivación del mercado en los próximos tres años, que posiblemente pase por la necesidad de trabajar en el desarrollo de técnicas y materiales que reduzcan los costes para los pacientes.
Los cirujanos plásticos creen que la recuperación pasa por un incremento de a calidad en los procedimientos, atención personalizada del paciente y reducción de