La mastopexia es una operación con la que se consigue elevar, corregir la flaccidez y remodelar el pecho caído de las mujeres. Este descolgamiento puede deberse a diferentes motivos, por lo que cada intervención tendrá unas características distintas. Así pues, antes de realizar una operación de cirugía estética, deberá realizarse un estudio de cada persona detectando dónde es necesario llevar a cabo las incisiones que consigan que el pecho recobre su posición inicial.
Tipos de mastopexia
Dependiendo de la forma que tenga el pecho se desarrollan diferentes tipos de mastopexia. Así pues, lo primero que debemos determinar es qué tipo de pecho tiene la mujer. En este sentido podemos distinguir cuatro tipos de pecho atendiendo a su forma, aspecto y condición. Los más habituales son:
1.- Pechos pequeños
En este caso, los senos tienen tejidos grasos con poco volumen y hay un exceso de piel. Generalmente son mujeres que han pasado por uno o varios embarazos tras los cuales el tejido mamario se ha atrofiado sustancialmente. En este caso, la mastopexia que se realiza está acompañada de aumento de senos. Durante esta operación se coloca un implante que aporta volumen, generalmente por debajo de los músculos pectorales, se retira la piel sobrante, y se realiza una elevación de la mama sobre el volumen ganado con la prótesis. Muchas de estas mujeres desean recuperar la forma y el volumen que tenían sus senos antes de los embarazos.
2.- Pechos grandes
En este caso el volumen del tejido graso es alto y el tamaño de pezones y areolas grande. Este exceso de peso hace que el pecho se caiga dando lugar a la flacidez. Para corregir este tipo de pecho, los cirujanos optan por realizar una reducción de mamas. Una operación en la que el pezón, la areola y el tejido mamario se remodelan ofreciendo una nueva y correcta posición a esta parte del cuerpo, situándolos en una posición más alta que la que tenían antes de ser intervenidos. Dado que ya existe un volumen excesivo no suelen utilizarse implantes mamarios.
3.- Pechos tubulares o mamas tuberosas
Los senos de este tipo son aquellos que tienen forma cilíndrica, con pezones y areolas de tamaño variable y una distribución de volumen en la mama irregular que genera un descolgamiento. Para estos casos suele llevarse a cabo una mastopexia, donde se recoloca el pecho en el centro del tórax al tiempo que se ofrece un aumento del volumen mediante implantes mamarios tipo anátomicos (con idea de normalizar la distribución de volumen en la mama). El problema en estos casos es doble: mala distribución del volumen y además descolgamiento del pecho.
Corresponde al médico cirujano escoger el tipo de mastopexia que llevará a cabo
Incluso si es necesario que esta intervención se combine con cualquier otra de corrección, aumento o reducción. Básicamente la mastopexia que se necesite realizar será mayor (o implicará mayores cicatrices) cuanto mayor sea el grado de descolgamiento que tenga el paciente. Es lógico pensar que cuanta más piel sobre, más habrá que retirar y por tanto se necesitarán mayores incisiones.
Así pues, si no estás contenta con el aspecto o la forma de tus senos, lo mejor es solicitar una cita en la clínica de cirugía plástica del doctor Gustavo Sordo. Él será quien te diga cuál es el mejor camino para poder lucir un buen escote sin que este hecho te deje cicatrices visibles o afecte a tu vida cotidiana durante mucho tiempo.