Cuando un paciente acude a su primera consulta en la clínica del Dr. Sordo para someterse a una rinoplastia en Madrid, se le informa detalladamente sobre la técnica de la operación, los resultados y el postoperatorio. Es en este último punto donde el paciente suele tener más dudas, como por ejemplo cómo evitar la congestión nasal.
Antes de responder a esta pregunta, tenemos que matizar que la rinoplastia tiene que ser siempre funcional y estética.
¿Cuáles son los síntomas de la congestión nasal después de una rinoplastia?
Los síntomas normales y comunes de los que no te tienes que preocupar son:
- Dificultad para respirar por la nariz: Debido a la inflamación y al proceso de curación, respirar por la nariz puede ser complicado durante las primeras semanas.
- Sensación de nariz tapada o bloqueada: Es común sentir como si las fosas nasales estuvieran obstruidas, lo cual puede durar varios días o semanas.
- Secreción nasal: Es posible tener una ligera secreción de mucosidad o incluso restos de sangre, lo cual es parte del proceso de recuperación.
- Sensación de presión o pesadez: La inflamación en los senos nasales puede causar una sensación de presión o pesadez en la cara.
- Pérdida temporal del sentido del olfato: Esto se debe a la hinchazón interna que bloquea el flujo de aire y la capacidad de percibir olores, pero es temporal.
- Sequedad en las fosas nasales: La nariz puede sentirse seca debido a los tapones nasales o al uso de medicamentos postoperatorios, lo que contribuye a la sensación de congestión.
- Leve sangrado: Puede haber pequeños restos de sangre mezclados con mucosidad, lo cual es normal durante los primeros días de recuperación.
¿Cuando desaparece la congestión nasal después de una rinoplastia?
La mayoría de la congestión nasal desaparece totalmente después de dos a cuatro semanas post-operatorias. Va desapareciendo de forma progresiva. Sin embargo, en casos donde hubo mucha manipulación de las estructuras nasales internas, como una corrección de tabique o reducción de cornetes, podría tomar hasta tres meses o más para que la inflamación interna disminuya completamente y el flujo de aire se restablezca al 100%.
Recomendaciones para evitar las congestión nasal
Una vez realizada la rinoplastia, es común experimentar congestión nasal debido a la inflamación de los tejidos internos y la acumulación de secreciones postoperatorias. Aunque es un síntoma esperado, existen diversas maniobras que se pueden hacer en casa para aliviar esta molestia una vez que se retiran los tapones nasales (normalmente se retiran en el hospital al día siguiente de la cirugía). A continuación, te ofrecemos una serie de recomendaciones para minimizar la congestión nasal y acelerar la recuperación:
1. Lavados nasales con solución salina o agua de mar estéril
Uno de los métodos más efectivos para mantener limpias las fosas nasales y evitar la acumulación de mucosidad es realizar lavados nasales con soluciones de agua de mar estéril, como por ejemplo “Rinomer Fuerza 3”. Esta solución ayuda a limpiar las secreciones y restos de sangre que puedan quedar tras la cirugía, además de actuar como descongestionante.
Se recomienda realizar dos o tres lavados al día. Esto no solo ayuda a mantener la higiene nasal, sino que también alivia la sensación de congestión, manteniendo las fosas nasales húmedas y promoviendo una mejor cicatrización. El agua de mar estéril no irrita la nariz y es completamente segura para usar durante el proceso de recuperación.
2. Uso de corticoides orales para reducir la inflamación
Durante la primera semana postoperatoria, tomar un corticoide oral suave puede ser una excelente opción para reducir la inflamación de las mucosas y aliviar el edema que genera la congestión.
3. Hidratación adecuada
Mantenerse bien hidratado es crucial para una recuperación óptima. Beber abundante agua durante el día no solo contribuye a mantener el cuerpo hidratado, sino que también ayuda a diluir las secreciones nasales, haciendo que sean más fáciles de eliminar. Además, la hidratación adecuada mantiene las membranas mucosas húmedas, lo que puede reducir la irritación y la sequedad en la nariz.
4. Evitar ambientes secos y utilizar un humidificador
La sequedad en el aire puede empeorar la congestión nasal, por lo que es recomendable utilizar un humidificador en la habitación, especialmente durante las primeras semanas postoperatorias. El uso de un humidificador mantiene el ambiente húmedo, lo que puede ayudar a reducir la sequedad nasal y facilitar la respiración.
Este dispositivo también puede aliviar la irritación de las fosas nasales, prevenir la formación de costras y contribuir a que las vías nasales permanezcan limpias y libres de obstrucciones.
5. Evitar esfuerzos físicos intensos
Durante las primeras semanas después de la cirugía, es importante evitar cualquier tipo de actividad física intensa, ya que puede aumentar el flujo sanguíneo en la cara y la nariz, lo que podría agravar la inflamación y prolongar la congestión. Actividades como levantar objetos pesados o hacer ejercicio intenso deben evitarse hasta que el cirujano lo apruebe.
Además, mantener la cabeza elevada mientras se duerme, utilizando una almohada adicional, puede ayudar a disminuir la hinchazón y mejorar la respiración nocturna.
6. No sonarse la nariz
Aunque puede ser tentador, no se debe sonarse la nariz durante las primeras semanas después de la rinoplastia. Sonarse la nariz puede causar irritación, aumentar la inflamación y en algunos casos, provocar sangrado. En lugar de sonarse, puedes optar por los lavados nasales con solución salina para eliminar las secreciones de manera segura.
7. Seguir las indicaciones postoperatorias del cirujano
Es fundamental seguir al pie de la letra las indicaciones de tu cirujano. Esto incluye el uso de los medicamentos prescritos, como antibióticos, descongestionantes o antiinflamatorios, y asistir a todas las citas de seguimiento. Si en algún momento experimentas un empeoramiento de la congestión o síntomas inusuales como dolor intenso, fiebre o secreción de mal olor, es esencial contactar a tu cirujano de inmediato.
Conclusiones
Por lo tanto, para evitar la congestión nasal que se produce tras la retirada de los tapones nasales después de una rinoplastia hay que:
- Realizar de manera sistemática una cirugía de septo nasal.
- Realizar siempre que proceda una cirugía de los cornetes o turbinoplastia.
- Utilizar de manera sistemática lavados nasales con agua de mar estéril.
- Administrar corticosteroides orales suaves durante la primera semana de postoperatorio.
Para más información sobre la técnica de rinoplastia utilizada por el Dr. Sordo o detalles sobre el postoperatorio para evitar la congestión nasal, contacta con nosotros.
