Recuperación postparto

Llega de EE.UU. el «Mommy Makeover» para las mamás

Publicado el 13 de julio de 2014

Recuperar la figura tras el embarazo

El “Mommy Makeover” es la intervención que permite volver a recuperar el mismo aspecto corporal que teníamos antes del embarazo o incluso mejor que antes. En un acto quirúrgico que combina las técnicas necesarias para conseguir una recuperación total del cuerpo.

Nueve meses de gestación, los daños del estrés, el parto y el periodo de lactancia dejan marcas visibles sobre el cuerpo femenino. La gran transformación y el milagro de traer al mundo una nueva vida suponen en la mayoría de los casos un terremoto corporal que deja huellas imborrables en pecho, abdomen y caderas. No todas las mamás son un modelo de recuperación tras el embarazo. Es bastante frecuente que después de la gestación el cuerpo manifieste una serie de cambios drásticos: piel sobrante en el abdomen, estrías, descolgamiento de pecho, flacidez, pérdida de volumen mamario, acúmulos grasos localizados, etc. La dieta y el ejercicio no son siempre recursos suficientes para recuperar el tipo. Muchas mujeres descubren que por más horas de gimnasio y aun perdiendo los kilos sobrantes, hay cosas que no vuelven a su lugar de origen.

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Es necesario siempre un diagnóstico previo del cirujano plástico para detectar si existe una separación de los músculos del abdomen o si el pecho tiene alguna posibilidad de volver a su volumen con la misma turgencia que antes. Solo el cirujano plástico puede decidir si necesitas someterte a una o varias técnicas para recuperar tu figura pre-embarazo.

El Mommy Makeover ofrece una solución integral, más asequible y con una recuperación más corta que si se realiza en varias operaciones por separado.

1) Pecho: aumento, elevación o reducción

2) Abdomen: Tummy Tuck – abdominoplastia o “mini” abdominoplastia

3) Cuerpo: liposucción a medida

Previo diagnóstico y análisis personalizado, el cirujano puede diseñar un Mommy Makeover adaptado a las necesidades de cada mamá.

Recuperación: entre 1 semana y 15 días dependiendo de las técnicas empleadas. Al unir varios procedimientos se acorta el tiempo de recuperación con la ventaja añadida de una sola entrada al quirófano. Ya no es necesario sumar los 7 días del aumento y elevación del pecho, más los 15 de la abdominoplastia y los 10 de la liposucción. Con la mejora física, llegan los cambios psicológicos, ambos en positivo. La nueva madre vuelve a sentirse atractiva como mujer, su autoimagen y autoestima también se recuperan. Estar en buena forma y dejar de pensar que el embarazo supuso un “antes y después” en el cuerpo es muy importante tanto para las relaciones de pareja como para continuar con su vida laboral y social.

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