Normalmente la paciente pasa una noche hospitalizada por razones de seguridad y confort. Al día siguiente es dada de alta, una vez que el doctor haya comprobado que no hay incidencias. Se marchará de la clínica con un sujetador específico, sin drenajes y sin vendajes salvo excepciones. Se le entregará una receta con la medicación que debe tomar para controlar las posibles molestias que se presenten, que suelen desaparecer en 2-3 días. La receta incluirá un tratamiento antibiótico que deberá tomar todos los días una vez que abandone la clínica. Igualmente se le entregará una cita para revisión en consulta y teléfonos de contacto incluyendo cobertura de posibles urgencias 24 horas.
Puedes encontrar más información en nuestra sección sobre mastopexia.